jueves, 24 de diciembre de 2015

RAFAEL SÁNCHEZ FERLOSIO EN EL CUADERNO DE ZENÓN



           «El viento abrió también un libro de plantas disecadas y se puso a pasar sus hojas. Las flores se mojaban y revivían, trepando por las paredes del salón, invadiéndolo todo, formando una espesa enramada, florida y llena de nidos de donde salían también pájaros que volaban hacia el redondel luminoso del techo.»

Alfanhui
1952


lunes, 14 de diciembre de 2015

GABRIEL JACKSON EN EL CUADERNO DE ZENÓN


           «Cuando Heinrich Himmler visitó Madrid en 1941, en relación con el entrenamiento de la policía política española, desaprobó, por razones prácticas, el promedio de ejecuciones. La desnazificación de Alemania y la desestalinización de Rusia han revelado el alcance del asesinato en masa practicado por los gobiernos totalitarios en el siglo XX. Los hombres que hicieron tales cosas en España siguen siendo sus dirigentes. Naturalmente, desde 1945 no se han comportado como se comportaron de 1936 a 1945. Pero algún día, con un cambio de régimen, el mundo se enterará abiertamente de los crímenes que hoy sólo pueden ser deducidos por evidencias fragmentadas y pobremente documentadas.»

La República española y la guerra civil (1931-1939)
1965



viernes, 4 de diciembre de 2015

LA VIDA SIN NOSOTROS

                Desde que desperté del coma experimento una profunda alteración: escucho los pensamientos de las personas que están cerca de mí. Nada he comentado a Sofía, ni a Zenón; sería embarazoso. Y desde el primer momento trato de librarme de semejante tortura, sin suerte, por cierto.
                Aunque os pudiera parecer lo contrario, aborrezco escucharos. Me desespera la falta de silencio y, a la vez, me aleja de mí mismo. Cada vez me cuesta más acomodarme en mi interior a meditar, a sentirme por dentro.
                Y es que, si al menos algo de lo que oigo fuera de interés, de una mínima profundidad o sensibilidad. Pero no. ¿Os habéis escuchado alguna vez vosotros mismos? Toda vuestra acomodada cobardía, todo vuestro egoísmo –creo que más cercano al autismo que a un simple mecanismo  de autodefensa-, toda vuestra interesada ignorancia, el tozudo individualismo, la indiferente reincidencia en el sometimiento del prójimo, y tantos otros lamentables vicios de reconocido prestigio.
                Lo único que os diré de Sofía y Zenón es que, en ocasiones tienen miedo; miedo a no poder salir adelante, a no estar a la altura, a que todo los que nos rodea se transforme  en un gran bazar en el que cada cosa tenga un precio y solamente los acaudalados puedan disfrutar del aire, del agua y de la tierra.
                Callad de una vez, malditos charlatanes y escucharos en silencio. Sobre vuestro tumulto se edifica la ignorancia; sobre vuestra ignorancia, el sometimiento, y sobre el sometimiento, la perpetuación de una insensata dominación que no podrá restablecer el equilibrio del mundo cuando éste quede definitivamente conmovido.
                La vida seguirá, pero ya sin nosotros.